El jefe de inspectores de Migración en el aeropuerto Viru Viru y un ex funcionario de esa entidad fueron enviados a la cárcel de Palmasola por orden del juez Arturo Vargas tras ser imputados de actos de corrupción.
Se trata de Joaquín Hurtado Bazán, que se desempeñaba como inspector en la terminal aérea, y de Alberto González Melendres que hace cerca de tres años trabajó en Migración.
Ambos fueron presentados ante el juez por el fiscal Germán Quezada que les imputó los delitos de cohecho pasivo y utilización de sellos para el visado de pasaportes con el fin de favorecer a extranjeros que ingresaron y salieron del país.
El representante del Ministerio Público expuso que las personas fueron aprehendidas después de una investigación en la que se detectó que formaban parte de una banda que negociaba pasaportes, preferentemente para estudiantes universitarios brasileños.
El fiscal dijo que el inspector Hurtado manejaba sellos y documentos hasta en su casa, situación que está prohibida. De la misma manera se procedió a la deportación de una brasileña que en una universidad privada actuaba como nexo para los negociados de pasaportes.
Durante la audiencia Alberto González negó los cargos y aseguró que hace tres años que no trabaja en Migración.
Asimismo el responsable de inspectoría en el aeropuerto Viru Viru se declaró inocente de los cargos que se le imputan y afirmó que la investigación tiene un trasfondo político.
La investigación en Migración, encabezada por la directora nacional María René Quiroga, causó una reestructuración del personal en Santa Cruz.
Conforme a un comunicado del Ministerio de Gobierno, la reestructuración derivó en la destitución del director departamental, Dionisio Rivas.
Según la directora nacional, los cambios buscan transparentar la atención al público en los trámites para pasaportes, renovaciones, visas y otros.
Por el momento María René Quiroga dirige la dirección en Santa Cruz, de manera interina. Para inculpado son pugnas por pegas
Joaquín Hurtado Bazán, ex jefe de inspectoría de Migración en el aeropuerto Viru Viru, a tiempo de manifestar su inocencia en el juzgado, aseguró que desarrolla sus actividades desde hace tres años. Dijo que vive con su familia en el Plan Tres Mil y que percibe un salario mísero de Bs 1.200. “Todos los días salgo de mi casa a las cuatro de la madrugada y tomo micros para llegar a Viru Viru donde me quedo todo el día a trabajar. En el aeropuerto la comida es cara, el sueldo no alcanza para nada y hay mucha necesidad”, explicó.
El hombre, que afirmó ser de profesión contador y estudiante de Derecho, agregó que el despido masivo de personal no es por corrupción sino un pretexto por pugnas políticas del partido de gobierno para conseguir pegas. Señaló que en su lugar ya hay dos personas traídas de La Paz. “Yo soy camba, siempre trabajé duro pero tramaron esto que es político para traer gente de La Paz y darles pega”, indicó. |
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El deber
Emigracion funciona de la siguiente manera, surco, decide a quien pone previa cancelacion de un determinado monto por un determinado tiempo, si la persona que entra a emigracion no cumple con la cuota mensual que debe darle (calculo que deben ser como veinte mil al mes) se lo acusa de cualquier cosa y si se queja va preso.
Gente como surco hace que extrañe a los corruptos de pasado y eso ya es mucho.
Ahora con los que saca del estado +10 millones de dolares del gobierno venezolano (notese que no es regalo lo tenemos que pagar) para que surco compre empresas transportadoras y
mansiones en santa cruz hace que santos ramires sea un piojo tuerto.
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